miércoles, 19 de septiembre de 2012

Día 804

¡Hola pelones! ¿Qué tal estamos? Yo, agotado.

Después de semana y media de universidad me faltan fuerzas por todos lados. Pero. ¿sabéis qué? Sarna con gusto no pica, como bien dicen.
Estoy comprobando que la rutina cuesta casi tanto como me imaginaba. Pero me levanto con una sonrisa por las mañanas que no es normal. Me encanta saber que el despertador va a sonar y que me toca ir a hacer algo productivo.

Aunque también es cierto que estos días han sido jornadas de contraste. Quizás por el cansancio que me estaba pesando demasiado, o por verme tan cerca del final. Quizás por los miedos que me había empeñado en no reconocer, o quizás, porque las cosas simplemente pasan.
Me he obsesionado en querer escuchar tanto a mi cuerpo que puede que quiera tenerme "demasiado" controlado.
El caso es que el martes por la tarde, después de no encontrarme a tope, ni física ni mentalmente, desde hacía algunos días, me fui al hospital, directo a la planta de hematología.
Allí estaban mis mujeres, y además, mi SuperDoctora Martín.
Puse el brazo para que, por favor, me sacaran una analítica y no me fallaron. Todo estaba en orden. Lo que me había estado fallando los últimos días era la cabeza. Sí. Ansiedad, miedo, y un poquito más de ansiedad. Sólo eso explica que haya sido capaz de somatizar sensaciones que no podía tener. Sólo el llegar al hospital me alivió los síntomas de malestar, y el sentirme arropado por el pedazo de equipo del HUPA incluso hizo que me encontrase bien, fuerte y con energías renovadas.
Antes de que saliese del hospital habían llegado mis amigos, que ellos tampoco fallan. Y Sara. Estaban con mi madre. Mi tío llamándome por el móvil. En fin, en poco tiempo, otra gran demostración de los míos.

Mañana sigue programada la consulta de rutina que me tocaba, y nos aproximamos al final del mes. No sé lo que me deparará, aunque si sé que debo concienciarme de que la punción de fin de tratamiento está al caer. Sabéis lo que odio pensar que me están esperando con "la estaca". Pero es lo que toca. Y luego a ser muy positivos y pensar en muchos ceros.

Siempre he dicho que esta enfermedad era un 50% cabeza, un 40% medicación y un 10% suerte. He vuelto a ponerme las pilas, he vuelto intentar darlo todo en ese 50% que creo poder poner de mi parte. Lo de estos días  va a quedar en un simple punto de inflexión. Simple, pero a la vez muy importante.
Por si casualidad os veis en una situación parecida, recordad lo que dijo Aristóteles: "¡¡¡CON DOS COJONES!!!".

Y muchos besos y rutina para todos, ¡pedazo de pelones! :)

Por cierto, mirad que pedazo de vídeo, ¿qué? ¿qué no renueva las fuerzas?

4 comentarios:

Lou Perea dijo...

hoy el miedo vuelve a mí, y eso que sólo le duelen las piernas, no quiero, no puedo pensar. Me alegra tu vuelta al cansancio.

Lou

Anónimo dijo...

vamos elias!! vamos lou! hace unos dias tuve un cierto "golpe de miedo" por llamarlo de alguna forma... empezando con la frase "mami me duelen las piernas" y el corazon que no podia palpitar mas fuerte... y aunque solo fue eso... un simple dolor por andar mucho en bicicleta... el miedo me acompaño mas de una semana.
Despues de ello solo aprendi a pensar antes de que el miedo me gana... pensar si el esta palido o a mi me parece (porque el miedo me gana), pensar si es que esta cansado porque es un niño que jugo mucho el dia de hoy o... es parte de los temidos sintomas.
Si algo tiene que pasar pasara y sera inminente... solo nos dañamos y dañamos a los demas pensando en ello.. no se preocupen de antemano y recuerden que la energia positiva atrae lo positivo.
besazos elias, besazos de hermana mayor y a ti lou... abrazos de otra madre coraje ;)

Pili dijo...

¡Vamos campeón! La dichosa cabeza que nos juega malas pasadas... y es que no hay enemigo peor que nosotros mismos, que cuando las cosas van bien parece que solo podemos empezara a pensar en el "y si..."

La próxima vez, ¡ven solo a vernos de visita!

Un abrazo y un besote enorme para ti y para tu madre, ¡que al final no nos despedimos!

Irene, Umpa Lumpa & cía dijo...

Bueno, es normal que todavía cualquier cosa sea una alarma!!! Espero que cada vez más te vayas empapando de rutina. Que puede ser tan divertida como lo excepcional.

A mí dentro de poco también me espera la estaca... jaja :p (Seguro que a ti no te ponen el himno del Madrid para "tranquilizarte" buaggg)

Por lo demás, empiezo la uni el lunes, así que aún me quedan unos días de vacaciones.

Mantennos informados!!! =)